30 junio 2005

Manifiesto por la SPICULTURA

Los abajo firmantes creemos que en el Universo en expansión que es la blogosfera, las estrellas no mueren y el tiempo no resta, sino que suma.

No al ganB giB. Porque un Universo mejor es posible. Pero no sin Spica.





You'll never walk alone!

29 junio 2005

Mi ángel de la guarda

Ahí lo tienes... Adelantando camiones de tres en tres mientras canta a voz en grito Mis Amigos. Y encima por la carretera. ¡Qué obstinado! Viaje de trabajo y se empeña en ir por la carretera porque así disfruta más de la conducción. ¡Qué llevas cuatro meses sin conducir y tu muñeca es todavía PVC lacado!
Y Tú, ¿qué me dices? Magistral plan. Meterlo en un atasco de una hora... No ves que es incapaz de llegar tarde. Este jueguecito que os lleváis no puede ser sano. Le incitas y sabes que es un pecador convulso. Este chico no cambiará por mucho que Lo intentes.
Que sepas que lo de la moto tampoco funcionó. Ya la está reparando el muy cabezota y piensa cogerla cuanto antes. Es que no escarmienta.

Oye, que el acelerador no baja más, ¿no ves que eso es el suelo del coche? ¡Que no! ¡Que no! ¡Que no puedes trazar esa curva recta! Aunque no venga nadie... Que para eso es una curva. ¡Eso no se puede hacer!

Legal, me ha dicho que es legal. Señor, ves como no me escucha. Si es que no tiene remedio. Ahora se dedica a dormir 35 horas semanales. Claro, como sale entre semana, el fin de semana y siempre que tiene oportunidad... Y esa locura de los blogs, que no descansa este hombre, que va todo el día acelerado.
Y todo el día haciendo deporte. Que si ahora anda, que si ahora nada, que si ahora juega al paddle, que si ahora se va a la montaña... ¡Mientras fuma dos paquetes de Lucky a la semana! Y se cree que el aporte de vitamina C paliará los efectos de la nicotina. Es que encima es un infeliz.

Ahora entiendo, Señor, lo que es un castigo divino. ¡La próxima alma la elijo yo!

NOTA: Señor Ángel de la Guarda, me tomo muy en serio todas sus palabras, de verdad. Pero es que si no lo escribo así, nepo me acusa de triste :-D

Merchandising

El Patio de mi Casa

23h00 - BCN
Fumar en la ventana refugiado tras sábanas húmedas. Escuchar en silencio el incesante ñigo-ñigo. Hablar como un colegial remilgado con Dios. ¡Estúpido niño balbuceante!

Orar siguiendo las reglas. Nunca pedir por uno mismo, acordarse de los demás por turno. Agradecer lo regalado para valorar lo vivido. Perder el hilo. Recuperarlo. Divagar...

Sentir la soledad atenuada. Siempre mirar al cielo con la esperanza de ver algún día la búsqueda recompensada en un mágico guiño estelar.

Cerrar rápido la ventana. Desear que las palabras lleguen a su destino. Abandonarse a la paz. Descansar.

¿Por qué dicen que todas las oraciones van al Cielo?

28 junio 2005

El Patético

El domingo pasado no escribí sobre mi noche de sábado. El motivo es que me lo pasé enjaulado en casa engullendo desengaño a cucharadas soperas. Hace poco que conozco a Gala, pero ya me ha dado un gran consejo que ahora estoy aplicando. Estás patéticas líneas son todo lo que pude escribir sobre mi sábado.



00h00 - ZGZ
Vencer la tentación de abandonar el sofá. Castigo reflexivo impuesto por el pecado de la esperanza. Dejar pasar el tiempo hasta que ya sea demasiado tarde. Traducir letras en palabras sin significado. Páginas que pasan sin dejar rastro.
Zumbidos de Jazz revoloteando incansables. Encadenarse. Retener el súbito impulso de encontrarla. Atacado por imágenes fugaces de una conquista inabordable.

Nota: Flavi te debo una, gracias por estar ahí. Tienes una borrachera a gastos pagados cuándo y dónde quieras ;-)

27 junio 2005

Peggy Sue

Hace más de tres meses que visito el mismo centro de rehabilitación para motoristas imprudentes. Cuando llegas, la recepcionista Peggy Sue te enumera las correosas normas de utilización.

1. Dar los buenos días a la recepcionista
2. Colocar la ficha de asistencia en la bandeja Entrada
3. Pasar la tarjeta magnética por un lector en la pared (piiiip! o pip-pip, hay que repetir hasta que suene piiiip!)
4. Coger una llave H para la taquilla
5. Vestirse con ropa deportiva o quedarse en gallumbos (esto ya va con la persona)
6. Poner cara de tío-me-estás-matando una horita en el gimnasio
7. Tratar de enfriar con hielo descompuesto el miembro torturado
8. Recoger la ficha de asistencia (firmada personalmente por la adorable Peggy Sue) de la bandeja Salida
9. Vestirse con ropa de calle o volver a ponerse el pantalón
10. Devolver la llave H de la taquilla al montoncito de llaves H
11. Despedirse de la recepcionista.

Parece un proceso complejo, pero en el fondo resulta encantadoramente rutinario y seguro.

Sin embargo, Peggy Sue, añade en mi caso una variante al cuadriculado esquema. Tengo un nombre compuesto. Y no es un nombre compuesto de aquellos que puedes apocopar como Juanjo o Josema. En realidad, se compone de dos nombres extraños e inusuales entre sí. Es algo así como Julián Roberto. Pongamos también que me apellido López.

Dado que ella sólo me conoce por el nombre escrito en mi ficha, cada día nos cruzamos las mismas palabras:

- Buenos días, Julián López.
- Que te vaya bien, Peggy Sue.

Es nuestro pequeño ritual diario de descortesía musitada entre sonrisas mal disimuladas.

La Roca

Nunca me llevé bien con la Roca. Ella era el tipo de mujer despampante y fútil que siempre repelo (algo así como la chica pipiridú de Nepo). Nuestros caminos se separaron un día de despedidas frías y deseos calculados. La Roca emigró al extrajero y yo me quedé en mi sitio colmado de alivio.

Hace un tiempo que recuperé el contacto con ella a través del messenger. En la distancia la Roca no parece tan imponente y sólo la veo a través de una bruma matinal difusora. Hemos creado unos lazos imposibles de anudar en el plano físico. Nunca creí posible llegar a ser amigos y, sin embargo, ahora lo somos.

Me soprendo de que lo que las barreras físicas nos impiden en ocasiones sea facilitado por las palabras. Trataré de prejuzgar menos la apariencia en adelante. Aunque ésta sea una ondulante ninfa de ojos gatunos y cuerpo salvaje.

26 junio 2005

Devaneos de mente masculina

Flavi siempre responde mis correos. En ocasiones, cuando soy incapaz de contener mi frenética mente, ella acumula dos o tres mensajes en su bandeja de entrada. Flavi, obviando su acuciante carga de trabajo y sus preocupaciones, se dedica a responder uno por uno mis mensajes en su estricto orden de llegada. Siempre lo hace cuidando sus palabras. Revisando el texto antes de enviarlo.

Hace un par de días recibí una respuesta de Flavi que producía un hueco en nuestro intercambio. En principio, no le dí importancia. Pensé que quizá no considerase oportuno responder a ese correo.

Después me asaltó la sensación de que ese correo debía de haber sido capturado por su voraz sistema anti-spam. Entonces revisé el correo y me convencí de que tampoco era tan importante como para volvérselo a reenviar.

Aunque, por otra parte, yo siempre respondo sus correos. Y siempre lo hago en orden. Como ese correo perdido era en respuesta a uno de Flavi, ella debió creer que olvidé ese correo y nunca lo respondí.

Se lo reenvié.

25 junio 2005

Musas de juventud

Musas

Ida la musa
viene el silencio.
Bajo la oscilante luz
de macabros candelabros
yace el cuerpo yermo.


Alza la vista,
muestra sonrisa
que no dolerá,
ya se te avisa.

Enseña tus ojos
y déjame ver
lucientes astros
al anochecer.

Ahora eres musa
dulce y serena
y otorgas tu gracia
al triste poeta.


Tú eres libre mi musa,
tú eres diestra mi bien,
no encierres tus bellas alas
en el jardín del amor.
¡Que arriba el cielo estrellado
luce triste sin su sol!

24 junio 2005

Metamorfosis Nepal

Ups! Me he olvidado el traje en Barcelona. En fin, da lo mismo, en realidad sólo voy al aislado despachito de Pretty Woman y ella me conoce desde hace mucho. Me voy a poner lo primero que encuentre por este ajeno armario y así se llevará una sorpresa divertida.

Unos metros antes de llegar al despacho cruzo mi mirada con Pretty Woman a través de la puerta abierta. Percibo una perturbación en su mirada. Al entrar al despacho observo a tres desconocidos: un individuo trajeado y dos secuaces engominados.

Allí estaba yo. Con el cargo político, sus consejeros y la absorta Pretty Woman. He sacado un boli bic que se negaba a escribir de mi bolsito cruzado y me he sentado a la mesa intentando estirar todavía más mis pantalones XXL en un intento imposible por disimular la abertura en el talón de mis preciosos zapatos de verano...

¿Por qué me dejaré poseer por el espíritu de Nepo?

Serie mis compulsiones. El trabajo.


Me enorgullezco de mi bien entrenada habilidad para coleccionar compulsiones. Disfruto de una capacidad asombrosa para llenar mis escasos momentos de tareas irrenunciables. Os aseguro que la combinación de esta cualidad con el perfeccionismo resulta francamente apabullante.

Un par de meses atrás fracturé la cabeza de mi radio y el escafoides de mi mano derecha cuando conducía volando bajo mi moto a la salida del trabajo en busca del último supermercado abierto. Los médicos me obsequiaron con dos tornillos Hertbert (la de cosas que aprende uno en los hospitales) en el codo y una decorativa escayola de treinta esplendorosos centímetros. Durante la rehabilitación (esta es otra de mis compulsiones pero ya os la contaré algún otro día), he conseguido sin ayuda alguna fracturar también el cuello de mi radio y un insignificante huesecillo de la muñeca (y no preguntéis cómo se llama este hueso, porque aprenderme escafoides ya me ha costado lo mío!).

En todo este proceso establecí un nuevo hito histórico personal: abandonar el trabajo durante cuatro días enteros. Lo sé. Soy un irresponsable. Os pido que no me juzguéis por ello. En realidad me pregunto si cuentan todos los días o sólo la mitad porque los aproveché para a atender jefes y compañeros por teléfono. Por cierto, os recomendaría que esperáseis a que os retiraran el gotero antes realizar este tipo de prácticas...

En todo caso, me las conseguí apañar para que la operación me la practicaran un viernes. Reconozco que tuve que mentir un poco, pero está justificado. Era una causa justa. Me brindaba la maravillosa oportunidad de viajar a Zaragoza el jueves por la mañana, exponer una brillante presentación (con el brazo vendado y el traje estaba hecho un pincel!) a un importantísimo cliente y regresar ese mismo día a Barcelona apareciendo en el hospital por la tarde como un chico bueno y dolorido.

Después de la operación, mis padres me ataron al coche y me llevaron para Zaragoza. Les conseguí convencer (soy un encanto cuando me lo propongo) de que me dejasen quedarme en mi propia casa porque me defendía fenomenal con mi nuevo yeso y mis relucientes tornillos. De esta manera pude conectarme a la oficina furtivamente para solucionar dudas tan vitales para la subsistencia del planeta como ¿debemos conectar la aplicación cliente mediante un protocolo SSO o quizá sería mejor integrarla en la propia autentificación LDAP? Fascinante y embaucador mundo de la informática...

Y es que, acostumbrado a trabajar 60 horas semanales, no es humano obligarme a estar en mi casa mirando al techo. Me tengo que defender, vosotros hariáis lo mismo. No obstante, sabed que me lo he tomado con filosofía. Las primeras semanas me limité a realizar 30 horas semanales en aras de la cordura. Conforme la fracturas y re-fracturas dejaron de molestarme me estiré hasta unas ridículas 35 horas... Ahora, con la muñeca de piedra pero sin adornos de gotelé en el brazo, asisto al trabajo las 45 horas de rigor. Las 5 horas de más las añado porque necesito tiempo cada día para dedicarme a una de mis nuevas compulsiones: vuestros blogs. ¡Seréis desalmados! Con lo que disfrutaría de mi perfecta baja médica de 40 horas semanales y tenéis que venir a arruinarme la vida... Es que no tenéis perdón divino.

Dentro de dos semanas tengo ya planificado reincorporarme a mi relajante rutina de 60 horas semanales para poder volver a sentirme útil. En realidad tendré que inventar un nuevo tantra de 65 horas por vuestra maldita culpa.

Por cierto, aprovechando que hoy es fiesta en Barcelona he conseguido programarme una estupenda reunión/charla/coloquio con uno de mis idolatrados clientes en Zaragoza esta mañana...

23 junio 2005

Black out

Me mareo.
tic, tac
Una enfermera por pierna.
Un médico en la cabeza.
¿Quién me encuentra la Oficina
de los Momentos Perdidos?

*Amélie es la culpable

Sensación de vacío


Tenía la intención de describir lo que sentí durante la llamada de mi ex hace un par de días. Lo he intentado de muchos modos: utilizando el fiel e inspirador bolígrafo bic, paseando despacio por el espigón del puerto, sentado en el suelo a oscuras delante del portátil, cerrando los ojos con fuerza un par de minutos...

El mejor de mis esfuerzos ha producido tres frases patéticas y carentes de vida. Solo he querido rescatar una de ellas: "los mejores amigos y los peores amantes". Siete palabras concisas que encierran siete años de relación.

Me entristece la fría indiferencia que me producen 400 días de distancia. Me asalta la visión especular de un gélido personaje literario.

Recientemente me acusaron de ser un buen tipo. En mi defensa escribo estas líneas. Me siento una mala persona, aunque aparente lo contrario.

He llegado a la cruel conclusión de que lo único que soy capaz de amar es mi propia soledad. Ex siempre tuvo razón, merece algo mejor. Siempre he detestado la egolatría, así que debo ser coherente y detestarme.

Me detesto.

Nota mental: Recuerda detestarte otro día por reiterarte en el vicio de la objetividad.

22 junio 2005

Insanity Cliffs


Si la persistencia efímera
de mis inconcebibles sentimientos
desbordase los altos acantilados
que desafiantes retienen mi alma,
zozobraría errático el rumbo
mecido en las olas de la locura...

Guardo meticuloso cuidado
en preservar las antiguas murallas,
en amainar tempestades indómitas.
¡Más de una vez, brava la espuma,
asomó ambiciosa por los azotados riscos!

*Anotadle todos los derechos de producción a ella

21 junio 2005

Un viaje detestado

Trabajar en Argentina en Julio... ¡Asco biliar! Cansinamente decepcionado de la compañía.

¡Visitar el paraíso de la mano de un diablo burlón disfrazado de rango y autoridad!

Invocar a una inexistente paciencia. Desesperar por algún motivo de alegría. Fracasar.

Teñido de tristeza. Juzgado, condenado y ejecutado. En 60 segundos.

¡Anhelar con demencia la familiar soledad!

20 junio 2005

El café de casa de mis padres

[Me había prometido a mi mismo no incluir hechos objetivos en este blog, pero es que me dejo vencer muy a menudo por la tentación. Soy un vicioso, lo reconozco ;-)
Conste que la culpa de todo esto la tenéis todita vosotros. Que no dejáis de escribir esas deliciosas historias cotidianas y claro, ¡uno no es de piedra!]


Hace cinco años que tengo la santa y sana costumbre de comer los fines de semana en casa de mis padres. Vicisitudes de hijo modélico, ya sabéis...

Mi madre cocina con demasiada grasa, aceite de girasol (puaj!) y es compulsivamente recurrente con las recetas. Creo que en los últimos seis meses he tomado 'deliciosas fresitas bañadas en leche condensada' unas 50 veces. De hecho casi no recuerdo haber probado otro postre...

En la mesa siempre me preguntan por mis nuevas amigas y me deslizan indiscriminadamente encuentros casuales con viejas conocidas. Me hablan de lo guapa que está Pepita ahora que ha perdido esos kilitos de más, de la estupenda carrera profesional de Juanita como funcionaria interina (que no saben lo que es, pero que suena fenomenal) y de que a Jorgita le acaba de dejar el capullo de su novio con lo buena chica que es, fíjate tú (mamá, a las 55 años deberías comenzar a madurar, quizá el capullo de su novio la ha dejado precisamente por lo buena chica que es).

Lo siguiente es valorar mi aspecto físico. Por lo visto, no me cuido lo suficiente, he perdido muchísimos kilos y ya no me afeito tan a menudo como solía. Además mi vestuario es un asco y soy incapaz de renovarlo o rellenarlo. Estoy hecho un asquito, ¡ya te digo!

Rematan la faena recordándome que llevo cerca de dos años buscando trabajo en Zaragoza. Con lo listo y buen chico que soy, ¡hay qué ver cómo está la vida! Que no haya podido encontrar algo que me guste en taaanto tiempo (mi madre siempre pronuncia 'tanto' así). Que no me llamen para una mísera entrevista desde hace seis meses. Nej!

En ocasiones se mezcla alguna pequeña riña de carácter doméstico con mi madre. Se siente en la obligación de entrar a hurtadillas en mi casa durante la semana, mientras yo me deslomo en un trabajo esclavista en Barcelona, para hacerme la colada. Llevo años intentando hacerle ver que las coladas en Barcelona se hacen de la misma manera que en Zaragoza. Algo me habré perdido, porque para ella está claro que esto no es así.

Aunque todo eso no me importa demasiado. Es una rutina encantadora y no me cuesta ignorar reiteradamente sus consabidos comentarios. Les dejo disfrutar porque sé que les gusta y les da vida. Se diría que a veces soy capaz de ponerme el disfraz de un ser tolerante y compasivo.

Sin embargo, lo peor llega a la hora del café. Como son hipertensos (yo diría que también son algo hipocondríacos), sólo hay descafeinado. Y como el Mercadona es maravilloso en todas sus gamas y variedades de productos, el café es Hacendado. No sé si habéis probado este café en su modalidad requemada, pero para los que nos gusta el café es como tratar de engulllir engrudo en estado de ebullición.

Así que cada fin de semana, bebo tranquilo mi ración de engrudo y después tomo un café como está mandado en el bar de abajo antes de subir a mi casa. Sería fácil decirles que no me apetece tomar café, pero es que están tan orgullosos de lo que me ofrecen y lo realizan con tanto cariño, que la verdad... Les sentaría como una patada en la entrepierna que rechazase su preciado oro negro.

El camarero del bar ya me conoce y me sirve el café sin preguntar. Para él sigo siendo ese cliente que baja cada fin de semana a tomar su cafetito y fumar despacio un Lucky.

19 junio 2005

Busco a Jazz

Si al autor del presente blog se le ocurre, en este o en otro momento, caer en la tentación de semejante vileza lingüística en sus comentarios, procédase a ahorcarlo colgado de sus propios intestinos en la plaza mayor de la villa con un cartel que rece PZRFI (Pow de Zaragoza Rey de los Faltos de Imaginación), para escarnio, mofa y befa de todos sus convecinos.

Se hace saber!

Puedo escribir los versos más tristes esta noche

19H00 - ZGZ - Los amigos
Él tiene 5 días, ella no llega a los 600. Acostumbrarse a los milagros. Nada sorprende.
Un granizado. Una terraza alborotada por niños corriendo. Fumar en silencio, sintiendo la brisa en la cara. Padres y madres charlando a mi alrededor y ese pequeño milagro a dos metros de mi. Sentir la vida... y amarla.

21H00 - Casa de un amigo
Preparar una cena ajena. Enseñar a cocinar tortilla de patata. El olvidado arte de recibir. Servilletas colocadas en romboidal armonía. Esmerada elección de la distribución visual. No cenaré allí.

23H00 - Chino
Vuelven amigos del pasado. Hablar, reír, recordar... Neuronas que refrescan sus conexiones. La familiaridad de los momentos compartidos.

01H00 - ABC
Ponerse al día, nuevos proyectos. La amistad se fortalece. Somos y seremos. Amigos de siempre que se convierten en amigos para siempre...

03h00 - Mitos
Jazz. Situaciones recurrentes. Indecisión. Vulgar entrada atropellada. Brutal atracción, es ella. Indescriptible seguridad desde el primer momento. ¡Travieso Cupido de fin de semana!
1.800 segundos de palabras y sonrisas. Una despedida y un manido 'Si no eres tú, es que yo no estoy en esa fase'. Promesa de guardarla en la memoria expresada en voz alta.
Indescriptible desánimo. Es ella. Saberlo y dejarla escapar. Encadenado a una promesa imposible de cumplir. Su nombre es Jazz y es ella. Innata capacidad para la necedad.

04h00 - Jardín
Nada importa. Anclado en pensamientos pretéritos. Jazz llenándolo todo. Ser nada. Ser feliz y sonreír. Asumir que la he conocido... Intenso deseo de reencuentro. Sombras de vacío. Invisibilidad. No estar allí para ellas. Encerrarse en un floreciente interior. Incapaz de volver a la realidad. Sensación arrebatadora, fugaz, lacerante... Frustrante miedo del mañana.
Aterrizar en la noche. Rodeado de amigas con mirada intrigada. Derivar la conversación hacia una esteril discusión acerca de pendientes y sandalias. Tratando de esquivar la exposición de lo vivido. Bailar, beber, disfrutar... Evadir una soledad en crecimiento geométrico.

05h00 - Camino a un hogar vacío
Perdido en el recuerdo. Rememorar ese olvidado dolor. Sensación tanto tiempo negada...
Nimia muñeca, insignificante fragilidad de codo zurzido. Atenuación hiperbólica de lo físico.
Empeño en retenerla en mi mundo. Imsomnio. Lleno de vida, ¡cómo es imposible invocar la muerte!

18 junio 2005

Despecho tardío

Anegada tengo el alma
con el llanto de mi pecho.
Moza sana, moza recia,
¿qué sacaste de provecho?

No buscaste mi cariño
por juntarte pronto y mal,
que por tu boca dijiste:
¡Maño mío, yo te quiero!

Tonto fui que te creí...
Más no me enganchas en otra
que lo sepas mala moza.
¡Que no he de repetir!

Nota: Léase con acento aragonés.

Lo que no quiero

17 junio 2005

Extraña visión de mi

07H00 - BCN
No es mi armario. Hay grandes trajes, enormes camisas, pantalones inmensos... Desidia en la elección. Indiferencia. Hastío.

1.000 gramos cada mes. Son muchos meses y muchos gramos. El cuerpo consumido por un espíritu atormentado. Ambigüedad de pensamientos. No recuerdo lo que era, no asumo lo que soy.

Añoradas sensaciones de comodidad. Reflejarse en sintonía en el espejo. Gustarse...

Deseando cambiar la túnica por el maillot!

16 junio 2005

Cuestión de actitud

Un sabio chino conoció a Dios y le pidió que le enseñase la diferencia entre el Cielo y el Infierno.

Dios accedió a su petición y lo llevó en primer lugar al Infierno. Allí le mostró una enorme mesa llena de todos los manjares que se puedan imaginar. Sin embargo, los comensales morían de hambre porque sólo disponían de palillos de 2 metros de largo para comer.

A continuación Dios lo llevó al Cielo y le mostró exactamente la misma mesa llena de manjares y los mismos palillos de 2 metros de largo... En cambio los comensales parecían felices y bien alimentados

El sabio chino preguntó a Dios: ¿Cuál es la diferencia entre el Cielo y el Infierno?

Dios respondió: La diferencia es que en el Cielo los comensales se alimentan los unos a los otros.

Muchas veces la vida sólo depende de la actitud que tomes ante ella.

15 junio 2005

Correo para Gork

Está claro que no has ido a trabajar...

Creo que deberías hacer un pensamiento general. Cuando las cosas van mal no es para siempre. Algún día dejan de ir mal.

En este momento de tu vida hay ciertas cosas que no funcionan. Si por ello vas a provocar que otras que estás funcionando dejen de hacerlo (por ejemplo, el trabajo) te estás condenando a un pozo todavía mucho más hondo.

Tienes suerte en la vida, eres afortunado. Tienes muchas cosas. La vida no te machaca. Te da mucho y tienes la obligación de disfrutarlo.

Céntrate en ti. Haz lo que desees hacer... Sé egoísta!

Inténtalo al menos. Estás al borde del abismo, anímate.

14 junio 2005

Libertad

12h00 - BCN
60 días bajo el yugo de yeso. Despierta el esquelético brazo. Tormenta de sensaciones que no amaina. Volver a sentir la vida. Alegría casi ridícula.

1.800 segundos de ducha eterna, maravillosa sensación acuosa. Sangre en la piel nueva. Pasajero remordimiento por los campos yermos.

Cocinar, comer, limpiar... Volver a ser diestro. Todo es deleite. Bendito dolor de muñeca!

Somos carne, huesos y piel... y metal. Simple y brutal mecánica corporal. Fragilidad perfecta del ser humano.

Redescubrir la belleza de lo cotidiano refresca. Dejarse embriagar por la rutina. Sadomasoquismo vital.

13 junio 2005

Llamada triste

10h30 - BCN
Gork al teléfono. Está desesperado. Tanto corpachón como corazón. Lástima. Necesita ayuda. Golpes en su vida agujereándolo todo. Y empeño por destrozar lo que aún queda en pie...

Serenos consejos. Desear que sus oídos no permanezcan cerrados. Sufrir su sufrimiento. Impotencia mental. Bloqueo mutuo.

1.800 segundos son 21 euros. Es todo con lo que cuento. No es sucifiente. Desesperanza, lágrimas y depresión. Quiero y no puedo. Su pena contagia.

Nadie es original aunque todos son iguales. Corazones apaleados. Amor deseado es amor sufrido.

12 junio 2005

Una noche cualquiera

20h00 - Casa
Miraba el foro de Marlango esperando encontrar un lugar y un concierto cercano. Un parpadeo de MSN me alertó de la entrada de Fiera. La saludé sin mucho entusiasmo, una simple cortesía. Sin embargo, fueron dos horas de charla sincera y distendida. Muchas cosas fueron escritas, pero en realidad éramos dos treintañeros desencantados. La soledad nos atormenta y no hay huída posible. Afrontarla y entenderla es el único camino. Antes de la despedida, un móvil de ida y vuelta. Quizá un café de amigos en las próximas semanas, una vaga intención de un viaje a San Sebastián....

22h30 - Cine Goya
La venganza de los Sith. Indiferencia. Falta de preparación para el artificio de referencias cruzadas y guiños a los más fieles...

01h00 - Chupitería Gris   
Una copa tranquila (gin-tonic, como siempre) en un bar conocido. Comer pipas por dejadez y esperar lo siguiente.

02h30 - La Tierra (Doble)   
Ellos alegres y animados. Ellas, actitud constante, grises y aburridas. Nos dejaron solos en cuanto pudieron... Esta noche empieza a las cuatro de la mañana. Dos chicas bailando y cantando extrovertidas. Atracción por Esther. Nuestro encontronazo algo brusco. Tras varios minutos de tensa charla, queda claro que no somos lo que esperan. Con esfuezo hay que volver a fijar las formas: un intento por noche, nunca repetir en dónde has sido despachado. Premisas simples para evitar la frustación y la desesperanza. Ella espera en algún lugar. La paciencia la sacará de dónde se oculta. No importa la soledad esta noche, el objetivo es una mejor compañía persistente.

05h00 - Casco
Las andaluzas de la despedida estaban allí, la novia de uno de los nuestros también. La noche se termina... Demasiado cansado y desanimado para intentar nada. Noche repetida como tantas noches.

06h30 - Bar
Desayuno con bacón y aventuras de andaluzas. Un soltero con tanga de leopardo alegra el bar. La mañana se empieza a sentir. Volver a casa solo, rutina habitual.