12h00 - BCN
60 días bajo el yugo de yeso. Despierta el esquelético brazo. Tormenta de sensaciones que no amaina. Volver a sentir la vida. Alegría casi ridícula.
1.800 segundos de ducha eterna, maravillosa sensación acuosa. Sangre en la piel nueva. Pasajero remordimiento por los campos yermos.
Cocinar, comer, limpiar... Volver a ser diestro. Todo es deleite. Bendito dolor de muñeca!
Somos carne, huesos y piel... y metal. Simple y brutal mecánica corporal. Fragilidad perfecta del ser humano.
Redescubrir la belleza de lo cotidiano refresca. Dejarse embriagar por la rutina. Sadomasoquismo vital.
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