06 junio 2006

Transitividad

En la oficina me tratan como a un hermano pequeño. Me pasaron el portátil de alguien que lo sustituyó por uno más moderno. Hoy me han dado el móvil que usaba hasta ahora la persona que se ha quedado el que habían comprado para mí. Incluso los proyectos que me asignan son heredados (o, más bien, desheredados, pero esto se sale un poco del tema).

Yo lo miro todo divertido, sonriendo extasiado cuando se me concede la oportunidad de estrenar algo que ha sido desdeñado por otro. Comienzo a cogerle cariño a esta recogida paulatina de objetos descartados. Y como no acabo de encontrar mi sitio en la empresa, he pensado que debería solicitar un nuevo cargo diseñado a mi medida: Reciclador de Deseos Extintos (RDE, en informática las siglas son esenciales, ya os contaré otro día). Tal vez mañana hable con mi jefe y se lo proponga.

Lo que me recuerda que me ha llamado mi ex-jefe. Hemos estado intercambiando bromas al teléfono durante casi una hora. Las risas que nos hacíamos antes todos juntos. ¡Qué fácil era y qué tedioso resulta! El viernes he quedado a comer con él. Espero que invite. Yo llevaré las risas.

Aunque tal vez, después de todo, no haya más viernes. Porque según he leído en algún que otro blog el mundo se acaba hoy. En ocasiones no ver la tele ni leer los periódicos lo deja a uno desubicado. Supongo que alguna teoría cabalística habrá alineado los astros para que el momento de desaparición esté marcado por esta fecha. Por si acaso, me beberé un par de cervecitas, me fumaré tres o cuatro cigarros, me asearé con esmero y me acostaré temprano. No me imagino lo que podría ser la eternidad desaliñado, sediento, cansado y con un mono de nicotina bailoteando a mi alrededor sin cesar.

12 comentarios:

Pow dijo...

¡Me acabo de dar cuenta! Al leer el pie del post he visto 6 del 6 del 6.

:)

susej dijo...

El número de la bestia, cenutrio!!!!!!


y claro que tiene que haber más jueves, sino......¿qué pasará con los Guelbenzu? :(

Ya se sabe, cada loco con su tema y yo con los de Tachenko.

Nadia dijo...

Menos mal que lo leo ya mañana es decir hoy, vamos que ya no es día 6 y por lo que parece ha amanecido.

Prich dijo...

mira a ver si alguno de tus compañeros te cede su ex-mujer y la reciclas, ya puestos...

isterica dijo...

Lo siento Dorian, pero ya estamos a día 7 y el mundo no se ha acabado.

ecasual dijo...

El problema es que la eternidad sea también reciclable... Saludos.

ORACLE dijo...

lo peor es el resentimiento de los aparatos con sus antiguos amos. vigilelos de cerca...

Unknown dijo...

....vaya por diós.... pues yo te escribo el 7 y no ha pasado nada.... por qué tipo de calendario era el fin del mundo?.... lo de las risas es cierto, y no es esperar que pague él, el no hacer tú la intención de hacerlo.... ;)

HELEN -Mamá In Design- dijo...

¿Reciclador de Deseos Extintos? jajajaja eres un loco encantador.

Si queires nuevo trabajo vente a mi oficina y me echas una mano.

Besitosssss cariño!!!

Para, creo que voy a vomitar dijo...

Yo sigo vivo..., aún.

Mientras que no te pasen a un tía ya usada! (qué comentario más machista me ha salío, no?)

Lydia dijo...

En serio, el día del fin del mundo se regenera constantemente como pensando a ver si cuela, pero nada, ni Nostradamus ni San Pablo, nadie acierta.

Me gusta lo de RDE. Seguro que tú das un valor a todas esas cosas que de otro modo nunca hubieran conseguido ;)

Besos

Juan Enrique Vicuña dijo...

Es cierto que a veces uno se siente sobrando en este mundo. Saludos.