23 marzo 2006

De pedantería y obcecación

pedante.

(Del it. pedante).


1.
adj.
Dicho de una persona: Engreída y que hace inoportuno y vano alarde de erudición, téngala o no en realidad. U. t. c. s.


2.
m. desus.
Maestro que enseñaba a los niños la gramática yendo a las casas.

Hace poco me dijeron que mis palabras sonaban pedantes. Y ni siquiera mis amigos comprenden mi obcecación por lo enrevesado. Son dos características que quizá definan rasgos indelebles de la imagen que proyecto, la pedantería y la obcecación.

La limitación de mi habilidad expresiva me obliga a seleccionar con cuidado los términos que empleo. Me adhiero al significado de cada construcción linguística en un vano intento de acotarme en la definición exacta de lo que persigo. Adoro la estética del enlace de las letras. Admiro la sutileza sonora de los fonemas aliterados con elegancia. Escribo como si cada sílaba debiera encajarse en un rígido mecano de reluciente apariencia. Acepto esta pedantería como justo castigo a mi falta de recursos.

Quizá ese es el motivo por el que me maravillo cuando leo las palabras sencillas y concisas que expresan lo que alguna vez he sentido. Desearía saber exponerme así.

La vida puede contemplarse desde cualquiera de los puntos que definen la escala entre la sencillez y la complejidad. La persistencia de la soledad permite apreciar la magnitud de esa línea de intermedios. Discernir la posición en la que el otro se acomoda para mirarte. Y, aunque esa sucesión de puntos sea infinita, la experiencia delimita la zona que proporciona un espacio para la compresión, la cohesión y, tal vez, el amor.

Me obceco en encontrar una persona ubicada en esa zona deseada. Mi interés por el resto de ese universo es tan académico como el de un observador para con sus aves. Necesito esa precisión adecuada que me alinee con la inexistencia. Y mientras no la tenga, me conformo con nada.

Pedante y obcecado. Incomprensible para muchos. Un insignificante punto en la escala. Eso y nada más.

13 comentarios:

Shh... dijo...

Elegir las palabras con mimo y esmero para que describan exactamente una idea, no creo que sea un acto de pedantería. Ésta se encuentra más en la actitud de la que uno hace gala mientras las transmite.
Besos.

Azena dijo...

ay, que me derrito...

me encanta la pedantería... en el sentido que tú le das, que es más o menos el mismo que le doy yo...

aquí es donde expliqué lo que significa la palabra 'pedante' para mí

un beso

isterica dijo...

Caballero, siga usted escribiendo así, que a mí me encanta. Además para hablar utilizando los términos más vulgares, ya estoy yo. Así leyéndote, aprendo a utilizar otras palabras que normalmente no uso. Podría aprenderlo de los libros pero, los que suelo leer escriben tal cual yo me expreso, así que no puedo aprender de ellos.
Ah! Y no es peloteo, lo digo como lo pienso.

Bito dijo...

Hombre yo pedante no le definiria porque no creo que haga gala de su complejidad... aunque sí que es cierto que utiliza el lenguaje con guantes de seda, escogiendo cada palabra perfectamnte y montando un pequeño puzle donde ninguna de las piezas es intercambiable.

Creo que si puedes dominar la complejo podrás dominar lo sencillo, es solo cuestión de hacerlo, de no darle importancia a las palabras sino a la historia en sí, querer contar algo y que no te importen las formas.

Aunque no seré yo el más adecuado para aconsejarte, porque envidio esa capacidad suya para dominar el lenguaje así, ojalá pudiera yo hacer gala de su pedantez. Creo que es una linda virtud la que usted tiene, quizás, solamente como lector yo le recomendaría una cosa, una única cosa:

que se relajase y no fuese tan exigente. A veces, esa tensión, se refleja.

Un beso, tú.

Esther dijo...

venga usted para acá que le daré una inyección para su ego... escribe usted tan bien que nos deja a los demás por el suelo. Ser pedante no es, ni más ni menos que hacer alarde de, en este caso, vocabulario. Y esto que has escrito es tan perfecto que suena usted estupendamente pedante.

Pow dijo...

No pretendía leer este tipo de comentarios... No me hagáis sentir mal :´(

isterica dijo...

Hombre, si quieres te ponemos a caldo pero, date cuenta que eres una de las personas que más comentarios genera en sus artículos. Por algo será. Si no nos gustara tu forma de escribir haría días que no pasaríamos por aquí. ¿No crees?

Buttercup dijo...

Aceptamos pulpo como animal de compañía, si usted acepta Cervantes como uno de los mayores maestro de la literatura española.

Buttercup dijo...

Por cierto, Isterica, tu comentario reafirma como ninguna otra cosa mi post de hoy.

susej dijo...

Una persona al fin y al cabo.

Pow dijo...

Tienes razón Butt, tanto Isterica como yo nos definimos en este cruce de artículos y comentarios.

Cervantes... Prefiero omitir mi opinión. Que el pulpo preserve su soledad :-P

Anónimo dijo...

Tu pedantería y obcecación por encontrar la palabra exacta y encajarla en el sitio adecuado hace que cada uno de tus textos sea un tesoro, un pequeño descubrimiento.
Yo guardo con mucho recelo, aquel que me regalaste.

Anónimo dijo...

Creo que no voy a poder evitar el chiste malo...

Si quieres compresión, cómprate unas medias, hombre, que las hay estupendas!

(Lo sé, lo sé... yo también me odio XDDD)