07 enero 2006

Miedo me das


Anoche me desvelé de madrugada. El cuerpo no está acostumbrado al desordenado comportamiento de las fiestas continuadas. Es su manera de rebelarse.

Encendí la radio sin abrir los ojos. Hablaban del hotel Corona de Aragón. Unos veinte años atrás un incendio originado en las cocinas devastó todo el edificio. 78 personas murieron y más de un centenar resultaron heridas. Desde entonces la imaginación popular ha elaborado un par de leyendas urbanas sobre habitaciones malditas. Explicaban que las personas que pernoctan en la habitación 510 sufren pesadillas con frecuencia. Incluso una azafata observó en esa misma habitación una presencia que trataba de abrir la puerta de la terraza reiteradamente. De fondo la inquietante música de Damien apoyaba la magia de los relatos.

Siguieron contando historias de otros hoteles malditos. El Parador de Sigüenza, un par de hoteles sudamericanos, un céntrico hotel de Hollywood... En todos ellos se sentían presencias, ruidos y apariciones inimaginables. Terminaron recordando El Resplandor, recreándose en las escenas más macabras de Kubrick. La música demoníaca seguía infiltrando intranquilidad en la noche.

No me atrevía a moverme ni un milímetro. Me adentraba en las historias, en la música, en los testimonios... Nunca he creido en esta clase de sucesos. Quizá porque no los he vivido. Pero pasé auténtico miedo. Miedo del bueno.

Me gustó. Me sentí vivo. Quizá para mi cumpleaños me regale una nochecita en el Parador de Sigüenza. Sería interesante ver orar a esa monja en los escalones de piedra al pie de la ventana...

6 comentarios:

Iván dijo...

Milenio 3 quizás? A mi es que estás historias me parecen tan poco creíbles en general. Anda que no vive gente del miedo de los demás...

Buttercup dijo...

Y luego dicen de mí...
Mi antigua casa estaba al lado del Corona, recuerdo muy bien aquel día, pero creo q eso ya lo he contado en otra vida.

Unknown dijo...

....tu dirás.... pero recuerdo una noche observando (las estrellas) en unas ruinas de un monasterio en un pueblo cercano a Pucela, cuando empezamos a oir el quejido de un niño.... desde entonces arrojo piedras a cada chotacabras que se me cruza, aunque sea por ciudad.... pero el acojono fue general y del grande....

Isthar dijo...

Pero avísame que yo me ofrezco a grabarlo ¿eh? ;)

Raist dijo...

Milenio 3, correcto. Qué programa más malo. Pero en la soledad de la noche ya se sabe...

elmasmalo dijo...

Cierto, cuantas y cuantas historias del Hotel Corona... Esos programas de radio me gustan un monton, pero me ponen los pelos de punta y luego no hay quien se duerma, asi que paso de oirlos, jeje.


PD: He vuelto