El príncipe Humperdinck buscó sus armas y una espada brilló en sus manos regordetas.
-A muerte -dijo mientras avanzaba.
Westley meneó lentamente la cabeza.
-No -le corrigió-. A sufrimiento.
Era aquélla una frase extraña, que paró en seco al príncipe. Además, ¿por qué estaba aquel hombre allí tendido? ¿Dónde estaba la trampa?
-Me parece que no he comprendido bien.
Westley siguió tendido, sin moverse, pero su sonrisa se hizo más amplia.
-Será un placer explicároslo.
Eran ya las seis menos diez. Quedaban veinticino minutos de seguridad. (Quedaban cinco. Él no lo sabía ¿Cómo podía saberlo?) Lenta y cuidadosamente comenzó a hablar...
Westley, aún bajo los efectos de la píldora de resurrección, sin fuerzas para sostener su espada, consigue desarmar a Humperdinck sólo con sus palabras. Un futuro de sufrimiento relatado con nítido sarcasmo y efectivos detalles macabros. La mejor escena que jamás ha escrito Goldman.
Cuando Max Milagros dijo que había escuchado farolero no le faltaba razón.
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17 comentarios:
farolero... amor verdadero... ¿no es todo lo mismo? la lucha por la felicidad, al fin y al cabo...
te he pillado posteando... ;-)
quizá sea su mejor escena, pero hay otras que le van a la zaga...
Ser farolero es todo un arte... a mí no se me suele dar bien...
Qué buena la escena. De quitarse el sombrero.
De hecho... qué bueno el libro. De quitarse el sombrero.
(Y adivina qué opino de la película, y qué creo que hay que quitarse)
....hay que juntarse a echar unas manos de mus....
oye, yo al mus me apunto!!! seguro que me las llevo todas, Humilde. La grande, la chica, a pares (dúplex para mi solita) y en juego.... vaya... el juego creo que lo pierdo... me tenía que haber callado.
En fin.... en Retrato de Dorian Gray hay una referencia también a esto que dices ... y es que ... se puede soportar el dolor físico, pero sucumbir ante el poder de la razón, de la palabra... algo así creo recordar...
La palabra doctrinaire (un vocablo que inspira terror a las mentes británicas) reaparecía de cuando en cuando entre sus explosiones de carcajadas.
;-)
La princesa prometida es una de las pelis favoritas de Picolina, la compro hará tres meses... y todavia no la he visto!! Prometo verla pronto...
Te dejo un reguerito de "bocos", ok?
Casualmente antes de ayer vi esta peli (el libro no lo he leído aún) y esta escena es genial...
Mira que la he visto millones de veces y me sigue gustando como la primera.
uff! ¿En qué idioma estás hablando? No entiendo nada, ya te comentaré en otro artículo más sencillo que éste me supera.
Ese es mi Wes ;)
que decir,.-- me encanta que se luche con la izquierda siendo diestro, que el chocolate quite el mal sabor de las pildoras, íñigo montolla y que siempre sea el español el borrachin en estas historias, en fin...
:) Margarita Seis Dedos tambien es una farolera jajajajaj. Me encanta la peli.
Hola me llamo Miss Kubelik, tú mataste a mi Dorian. Prepárate a morir :p
Cuando Max Milagros dijo que había escuchado farolero no le faltaba razón.
Qué comentario más acertado.
Ahhhhhhhh, qué sonrisa se me ha puesto, qué momento!!!!
Y sí, ¡qué farol!
Mientras leía el post, no sé, juraría haber visto un R.A.G., os doy mi palabra de español(a)
:)
No me canso de verla... necesito conseguir el libro. Seguro que me encanta.
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