Ha sido la primera entrada de mi nueva agenda. Lo conocéis. Suele visitarme a menudo.
Casi nunca os hablo de mis cinco amigos de toda la vida. Aquellos que conocen cada historia que escribo. Hay más de veinte años de vida madurada y compartida. Me fascinan cosas distintas de cada uno de ellos. Hoy tan sólo os hablaré de la primera entrada.
Para él la vida no ha sido tranquila. Se ha visto obligado, en más de una ocasión, a capear vertiginosos temporales del alma. Aunque al final ha tenido suerte. Se lo merecía. Ahora descansa en una tumbona clavada en la arena amarilla de una playa repleta de exuberantes palmeras.
Lo que más me asombra de él es que, a pesar del sufrimiento, ha sabido cuidar su mejor cualidad: la sensatez. Siempre está tratando de corregir mi actitud alocada. Aportando un poco de luz a mis tinieblas. Cuando lo escuchas sabes que todo es tan fácil como él lo cuenta, aunque en ocasiones sea mi memoria la que le falle.
Cuando crezca me gustaría parecerme a él.
6 comentarios:
Quizás tú también le aportas la locura necesaria, y os complementais...
Besos!
Está tan sobado ya el dicho de Quien tiene un amigo tiene un tesoro, que a veces se dice sin pensar en lo verdadero que es.
Te felicito Dorian, realmente tienes un tesoro muy grande.
Quizás sea al contrario, gracias al sufrimiento la sensatez ha sido necesaria en su vida de desaires y penas.
A veces me da por pensar que uno elige a sus amigos en función de aquellas cualidades que le faltan, aquellos deseos que no tiene, aquellas pequeñas piezas que completan su vida.
Así tu amigo pasa a ser tu sensatez, y es parte de tu vida, completando esa parte de ti que esta rellena por cualquier otra genialidad, que quizás le falta a él, y por eso también te eligió....
En fin, que nos estoy liando. Ya me callo.
Cinco amigos desde hace veinte años... ¿eres consciente de lo afortunado que eres?. Pues eso.
Yo también pienso como awake. Y seguro que durante mucho tiempo tú también le has aportado las mil cosas que él necesitó.
Seguro que se siente orgulloso y afortunado con un colega como tú.
Tal como lo has descrito, también yo quiero parecerme a él cuando sea mayor :)
Teneis mucha suerte. Supongo que al menos conozco a alguno de esos 5, y siempre que me he acercado a ese "grupo" me ha encantado compartir momentos, formais una piña estupenda.
Seguid así, no cambieis, porque de algún modo os complementais y a la vez sois parecidísimos...
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