14 noviembre 2005

Inequívoco


Una gigantesca librería impersonal es el espacio ideal para adquirir sin remordimientos delirios sin sentido.

Hojeaba un ejemplar de El Principito mientras admiraba las sencillas ilustraciones. Recordaba diminutos fragmentos imborrables. La imagen de mi gastada edición se asomaba difusa a la memoria. Soñaba con la niña a la que iba destinada el libro. Quizá cuando creciera fuese capaz de evocar los mismos sentimientos que me abstraían.

Giré la vista hacia los libros apilados. Al lado de la edición que tenía en mis manos había otra muy parecida. Era una publicación que incluía el texto original en francés. No conozco ese idioma. Así que me llevé ambos libros.

Hay palabras que no pueden ser traducidas. Hay frases que jamás podrían componerse de otra manera.

Mais si tu viens n'importe quand, je ne saurai jamais à quelle heure m'habiller le coeur...

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Nunca es el momento perfecto o tal vez es que dé igual...

P.D. Como escuece este post.

Raist dijo...

Poz zi. Tremenda frase.

¿Seguimos sin rimar?

Isthar dijo...

Y poder degustar las frases sin necesidad de estar buscando la traducción de casi todas las palabras, ya debe ser una maravilla.

El principito es un libro que no me cansaré de leer... y unas veces soy rosa, o serpiente, o zorro, o baobab... y hasta la oveja dentro de la caja...

Azena dijo...

maravillosa...

María D. Sánchez dijo...

Todas las personas mayores antes han sido niños. (Pero pocas de ellas lo recuerdan).
Esta frase es de la dedicatoria del libro... y bueno k verdad, no pekes?

Pow dijo...

Marea, no es una frase de la dedicatoria. Es del capítulo del zorro. Le pide al Principito que le avise de la hora a la que lo va a ver. Para poder preparar su corazón para ese momento.

HELEN -Mamá In Design- dijo...

desde luego el principito es para quitarse el sombrero...

Un buen acierto para regarla a cualquier ser humano. Una lección de vida.

besos rey!!

Buttercup dijo...

Le tengo mucho cariño al Principito, quizás porque es la primera obra de teatro que hice y quizás por el protagonista... bueno, que eso es otra historia.