Aquella noche de San Mateo

[Escribí esta obra la noche de San Mateo de 1996. Por entonces leía mucho a Shakespeare y eso siempre deja cierta huella estructural. Se trata de historia tan real como fui capaz de recordarla al día siguiente y me trae recuerdos de Rubí, a la que desee como a nadie he deseado. Quizá vosotros no le encontréis ningún sentido a todas estas frases inconexas, pero las recupero ahora porque me hacen darme cuenta de que soy como era.]

AQUELLA NOCHE de SAN MATEO

PERSONAJES

Pow, estudiante de ciencias
Rubí, estudiante de letras
Vicky, amiga
Vero, amiga
Amigos
Dos Maromos
Un Viandante

[La acción, en El Casco]

ACTO ÚNICO

ESCENA PRIMERA

[El Casco. Esquina de la plaza]

Entran Dos Maromos y Rubí. Entran Pow y Vicky.

Rubí. ¡Hola!
Pow. Hola.
Rubí. ¿Sabes que escribes muy bien?
Pow. Ya ves, ingeniero de pro.
Rubí. Porque tú quieres. Hay que estar realmente jodido para poder escribir así... Vamos a gritar, ¿vale? A la de tres. Una, dos y tres.
Rubí, Pow y un Maromo. ¡Aaaaaaaaaahhhh!
Rubí. No, así no. Mucho más fuerte. Venga, otra vez. Una, dos y... tres.
Rubí y Pow. ¡Aaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhh!

Rubí se desequilibra y se da un golpe en la boca con un coche aparcado.

Rubí. (Riéndose) ¡Ay, qué golpe me he dado!
Pow. (Riéndose) Sobrevivirás.

Se despiden los maromos.

Vicky. (A Pow) Súbeme a este cubo de basura, que quiero sentarme.

Pow no alcanza a subir a Vicky y el cubo de basura se cae.

Pow. Será mejor que nos vayamos a sentar a la plaza. Con los demás
Vicky. Vale (Se van)

ESCENA II

[En otro lugar de la misma plaza]

Entran los Amigos. Entran Rubí, Vicky y Pow. Rubí y Pow se sientan aparte.

Rubí. Hace mucho que no nos vemos.
Pow. Sí, la verdad es que casi demasiado.
Rubí. Contigo es fácil hablar... y ahora estoy un poco triste.
Pow. Cuéntame.
Rubí. Es que estoy muy colgada por el hermano de Vicky... Es un tío muy majo, así como tú, pero más duro. Tú... Lo tuyo era diferente, era algo así como que me caías bien. Sin embargo con él estoy muy colgada.
Vicky. Nos vamos al Charro, ¿venís?
Rubí. ¿Al Charro? Vale, luego iremos.

Se van Vicky y Vero.

Rubí. Estoy muy colgada y él me ha dejado sola. ¡SOOOOOLA!
Viandante. Si le pica el chichi, ráscaselo.
Rubí. ¿Qué ha dicho?
Pow. Déjalo, es algo demasiado grosero como para resultar interesante.
Rubí. Él me ha dejado, se ha ido a Salou a ver a una rubia que conoció hace sólo tres semanas... y ya se ha ido allí a verla. Hay veces que pienso que sólo me quiere por mi cuerpo. Estoy segura de que si me conociese de verdad... Es que sólo me ha visto los fines de semana de marcha y yo sé que si él supiese cómo soy yo... Cree que soy una loca adorable.
Pow. La esperanza. Sigues creyendo en ti. Lo más difícil es matar la esperanza. No obstante, creo que debes decidir si te das por vencida o vas a luchar por él.
Rubí. No lo sé... La verdad es que estoy confusa. ¿Has visto alguna vez, delante de tus narices, enrollarse a la persona que te gusta con otra? Es muy duro.
Pow. Pues sí, también me ha tocado de eso en esta vida.
Rubí. Es que no sé qué tendrá esa zorra, que además es una pija y controla al pobre hermano de Vicky. Lo está convirtiendo en un idiota y yo sé que podría cambiarlo. Si pudiera...
Pow. Esta no es la Rubí que yo conocí... Tienes que seguir adelante, sin darte por vencida. ¡Lucha por él!
Rubí. Creo que no puedo con ella, lo tiene agarrado por los huevos.
Pow. En todo caso, recuerda que tú decides.
Rubí. ¿Vienes al Charro?
Pow. Vale, pero sólo un rato, que quiero volver con éstos. (Se van.)

ESCENA III

[Camino del Charro]

Entran Pow y Rubí.

Rubí. Hace mucho que no me llamas... ¿podré llamarte algún día? Para tomar café y hablar.
Pow. Por supuesto, cuando tú quieras. Ya sabes que te dije que éramos amigos.
Rubí. ¿Ah, sí? Como amigos y punto. Me parece estupendo. Lo que pasa es que nunca nos vemos...
Pow. Bueno, ese año he cogido una asignatura en tu Facultad. Puede que nos veamos más.

Caminan.

Rubí. He estado leyendo un libro muy bueno. Seguro que tú te sientes muy identificado con él. Trata de un tío que es diferente pero él no quiere ser diferente...
Pow. Lo siento, creo que me quedaré con El Médico y Chamán.
Rubí. Pues yo tengo también el tercero, La Doctora Cole.
Pow. Ese ya me parece una mierda. Me quedo con el segundo de Lestat.
Rubí. Cierto, ése también es muy bueno.

Llegan al Charro.

Rubí. Vamos a buscarlas al piso de arriba. (Se van.)

ESCENA IV

[En el Charro]

Entran Vicky y Vero. Entran Rubí y Pow.

Rubí. ¡Hola!
Vicky. Hola.
Pow. (A Vero) ¡Hola!, vaya pantalones más chulos que llevas. Me molan muchísimo.
Vero. ¿Sí?, pues mi ex-novio los odiaba.

Rubí y Vero se van.

Vicky. Vamos a bajar al piso de abajo.
Pow. Bien.

Entra Rubí.

Pow. Me voy a ir ya.
Rubí. Bueno, ¿podré llamarte algún día para hablar? Ya sabes, como amigos...
Pow. Claro, hazlo.
Rubí. Y tú también me puedes llamar si necesitas hablar.
Pow. Gracias, pero ya sabes cómo soy. Siempre voy a mi bola.
Rubí. Sí... adiós.

Se abrazan.

Pow. Adiós y, por favor, sal de dónde estás. (Se van.)

Es la nostalgia un recuerdo falso y feliz.
Tal como la utopía. Que es un futuro improbable
e igualmente feliz.